Hay una gran cantidad de lugares a donde acudir para obtener orientación sobre cómo educar a los hijos sobre el sexo y otros temas importantes; sin embargo, hay escasez cuando se trata de cómo enseñar a los jóvenes sobre la riqueza.
Encuestas recientes han revelado que a los padres les resulta más fácil hablar de drogas que de dinero.
Enseñar a los niños a manejar los beneficios y desafíos de la riqueza puede ser la herencia más valiosa que un padre puede ofrecer, ya que les ayuda a comprender la gestión de su propio futuro financiero.
Los padres acaudalados a menudo luchan con el temor de que informar a su hijo sobre su riqueza conduzca a una sensación de derecho y a falta de motivación. Si bien no hay una edad exacta para revelar su patrimonio, se recomienda medir la madurez de su hijo para explicar las especificidades de su fortuna. Desde una edad temprana las familias deben tratar de proporcionar una comunicación coherente acerca de lo afortunado que uno es para ser financieramente estable.
A medida que los niños crecen pueden tener conversaciones más sofisticadas sobre la riqueza, y mientras tanto las experiencias que se viven como viajes al extranjero o recibir regalos de alta calidad deben venir acompañados de una explicación sobre la gratitud y no tomar las cosas por garantizadas.
Explicar que la riqueza se gana mediante el trabajo duro y la dedicación, puede ser útil para promover los rasgos fundamentales del carácter que se encuentran en aquellos que tienen éxito en sus esfuerzos.
Organizar reuniones familiares puede ser una forma eficaz de distribuir responsabilidades. Al mantener un diálogo abierto, las reuniones familiares organizadas pueden facilitar la formación del carácter, la comunicación significativa y el compromiso. La participación de miembros de la familia de una nueva generación puede ayudar a dar forma a las tradiciones familiares y crear un diálogo intergeneracional.
Last modified: septiembre 18, 2023